domingo, 29 de enero de 2012

Capítulo 13


Venían corriendo hacia nosotros, bueno, Mark corría y Natalia era arrastrada. Se pararon a un metro de nosotros y se apoyaron en la pared jadeando. Pidieron disculpas por haber tardado tanto.
Después de una larga explicación pasamos dentro del bar, pero no era un bar, era un restaurante de primera clase. Las tres nos quedamos pasmadas y nosotros con estas pintas -pero la gente no iban muy diferente a nosotros.
-Buenos días-Dijo un joven detrás del mostrador con una amplia sonrisa-, ¿Tenéis cita?
-Si-Contestó Mark con su acento inglés muy serio-, a nombre de Marcos Owen.
El chico asintió y nos mostró el camino, empezó a andar y andar y creo que estuvimos como 2 minutos andando hasta que llegamos hasta una pequeña salita con 6 asientos.
-Podéis sentaros-Dijo el muchacho mientras desaparecía por la puerta-.
Nos sentamos poco a poco mirando todo lo que nos rodeaba, estaba perfectamente decorado, entre moderno y antiguo, era muy extraño todo. Mark se sentó al lado de Natalia y al lado de ella yo con Lucas al lado, John al lado de Lucas y Marina al lado de John.
-Bueno, ¿Qué?-Comentó Mark- ¿os gusta?
Antes de que alguien contestara Natalia se lanzó encima de él y empezaron a besarse, ellos llevaban como mes y medio juntos, eran como uña y carne. Nos quedamos todos en silencio y de pronto noté una mano que rectaba por mi pierna hasta coger mi mano y la apretó fuerte mientras me acariciaba la palma. El muchacho los interrumpió de golpe y su cara era todo un poema, a mí se me escaparon unas pequeñas risitas mientras que Natalia se sentaba en su asiento avergonzada.
-Em…-Se aclaró la voz antes de proseguir- ¿Qué vais a tomar?
-Yo quiero una ensalada de lechuga y mucha zanahoria-Empecé yo-, después un filete de ternera poco hecho.
Lucas sonrió levemente mientras que Marina y Natalia ponían los ojos en blanco.
-Yo lo mismo pero en vez de ensalada mejor unos espaguetis para dos-Pidió Lucas-.
Yo sonreí y los chicos pusieron los en blanco y Natalia susurró un “Tal para cual” o “Lo suponía”, Lucas y yo nos miramos y empezamos a reírnos, la verdad es que éramos iguales.
-Yo quiero unas costillas para compartir-Dijo Mark mirando de reojo a Natalia mientras ella asentía.
-Nosotros dos lasañas de atún-Dijo Marina-.
-Ahora os lo traigo-Dijo el chico mientras se iba-.
En cuanto se fue todos empezamos a hablar y a hacer el tonto, empezamos reírnos y Natalia y yo empezamos a reírnos tanto que parecíamos unas focas retrasadas dándonos palmaditas en las piernas mientras que nos quedábamos sin respiración.
-Ay, ay…-Dije yo un poco calmada-, puff… que mal lo acabo de pasar-Entonces Natalia empezó a reírse otra vez y el ataque de risas empezó otra vez.
-¡Parar ya dios!-Gritó Marina- ¡Vuelve en ti Natalia! –Dijo sujetándola por los hombros zarandeándola de atrás para adelante- ¡Vuelve en ti!
Yo me calmé un poco mientras que Natalia empezaba a ahogarse, pero Mark la besó y se relajó, buena forma de hacerla parar. Cuando se separó Natalia tenía la sonrisa más tonta que había visto en mi vida. Entonces John pasó el brazo por los hombros de Marina y empezaron a besarse, yo miré a Lucas que me miraba con ternura mientras sujetaba mi mano, no me había fijado en que me sujetaba, entonces nos acercamos poco a poco y le miré a los ojos pero tenían algo diferente, no eran del color de la miel ahora eran amarillo con motas de color morado, me quedé pasmada mientras se acercaba poco a poco hasta que nos fusionamos en un pequeño beso. Todos nos separamos a la vez, al mismo tiempo en el que otro chico entraba por la puerta, tenía la misma edad que nosotros, 15 o 16 años y se puso rojo al entrar.
-Eh… bueno, aquí está la comida-Dijo completamente inmóvil en la puerta.
-¡Espera!-Dijo Natalia- ¿Y Lara? Yo la había invitado.
-Es verdad, desde que se cambio de instituto casi no la vemos, no vino ni en mi cumple-Dije yo-.
El chico estaba rojo como un tomate mientras ponía los platos en la mesa, y cuando me miraba yo sonreía mientras que Lucas le echaba miradas asesinas, una de las veces le di un codazo, se estaba pasando. Cuando terminó de servir la mesa se oyó como alguien gritaba mi nombre y después el de Marina y finalmente el de Natalia, salimos corriendo dejando atrás al chico y en la entrada estaba Lara teniendo una discusión con el muchacho de la entrada.
-¡Que si! ¡Que tengo mesa pero no se a que nombre!
-No la puedo dejar pasar señorita y deje de montar este alboroto.
-¡Mira!-Gritó mientras nos señalaba- ¡Las conozco! ¡Son ellas! Marina, Clara y Natalia.
Yo me acerqué medio corriendo hasta llegar a su lado y Marina y Natalia me siguieron.
-Esta con nosotras, no sabíamos si iba a venir-Dije rápidamente antes de que Lara se pusiera como una loca-.
El muchacho asintió con un pequeño suspiro y dejó pasar a Lara. Cuando ya estábamos a 2 metros de él Lara se giró y le sacó la lengua, yo la pellizqué un poco el brazo para que parara.
-Estás loca-Dijo Natalia riéndose un poco-.
Ella puso los ojos en blanco y justamente el chico que nos había servido la comida se chocó con ella y cayeron los dos al suelo.
-Eh, mira por dónde vas-Dijo Lara mirando al suelo-.
-Yo…
La ayudó a ponerse de pie y cuando se miraron los ojos de Lara se iluminaron completamente.
-No pasa nada…
-Me llamo…. Me llamo Alex.
-Yo Lara-Se puso roja como un tomate-.
-Oye si quieres ven a comer con nosotros-Sugirió Natalia-, es mi cumpleaños, yo te invito.
-No, no debería…
-¡Vamos!-Le cortó Natalia- ¡No pasará nada!
El sonrió tímidamente mientras que agachaba la cabeza, Lara sonrió contenta y empezó a andar. Entramos en la salita y cuando Lucas vio a Alex puso una cara extraña hasta que vio a Lara y se relajo un poco.
-Le hemos invitado a comer-Anunció Natalia-, ¿Os parece bien?
-No…-Susurró Lucas, solo lo pude oír yo asique le di un pequeño gran codazo-.
-¡Si, claro!-Contestaron los otros dos.
-Bueno, me llamo Alex-Dijo mientras se sentaba-.
Todos empezamos a presentaron y de pronto el se levantó, dijo que tenía que ir a por comida, cogió a Lara de la mano y se la llevó a la cocina. Todos nos quedamos totalmente callados ¿Qué acababa de pasar? La verdad es que hacían buena pareja, y vivían los dos en Guadalajara ya que Lara se mudó el año pasado.
Empezamos a comer después de que Natalia diera una palmada para espabilarnos todos. Cogí el plato de espaguetis y empezamos a comérnoslo Lucas y yo, después de comer muchos espaguetis pasó algo que nunca creí que me pasaría, cogimos cada uno un extremo del espagueti y finalmente nos besamos.
-Oh…-Dijo Natalia ladeando la cabeza-, que romántico.
Cuando nos separamos estábamos los dos rojos como tomates y nos sonreímos tímidamente, después seguimos comiendo y hablando hasta que Alex y Lara aparecieron por la puerta con un carrito lleno de comida.
-¡Invita la casa!-Dijo Alex con una sonrisa.
Todos empezamos a reír y a aplaudir, la bandeja estaba llena de pastelitos y bollos ¡Que rico! Cuando terminamos todo eran ya las 8:35 ¡Que tarde! Eso había sido una comida-merienda-casi cena. Nos despedimos todos a la salida y Lara se quedó allí con Alex, creo que entre los dos había algo. Cuando volvimos a casa yo estaba agotada y me tumbé en el sofá a ver la tele.
-¡Tráeme una zanahoria!-Le pedí desde el salón.
-Tú y tus zanahorias-Dijo mientras abría la nevera-.
A los 2 minutos ya me traía mi zanahoria pero cuando la fui a coger el apartó la mano y puso morritos para que le diera un beso y yo se lo di encanta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario